En el segundo día de implementación del Pico y Placa, los ciudadanos se están pronunciando sobre la medida que ha   generado opiniones encontradas, tanto por su efectividad como por la tarifa de circulación. En redes sociales se evidenció que la mayoría de los caleños está inconforme con el hecho de pagar por movilizarse por la ciudad sin restricciones y lo consideran inconveniente para el propósito de la medida, que es descongestionar y disminuir las emisiones de CO2. Muchos asocian esta condición como una ley para el que más tiene, dificultando a otras familias que se ven obligadas a madrugar y a gastar más.

Pese al rechazo, sí se notó un cambio significativo en las calles, principalmente al sur de Cali, donde aseguran estuvo más fluido la mayor parte del día, salvo en horas pico.
En eso coincidió el secretario de Movilidad, Juan Carlos Orobio, quien dijo se obtuvo buenos resultados,  aunque aclaró que la prueba real será el próximo lunes 23 de enero, cuando ingresan los universitarios.